Cabildo de Toma de Horas

Niño de GuevaraEn diciembre de 1604, se celebró en Sevilla el Sínodo Diocesano convocado por el Cardenal Fernando Niño de Guevara, en cuyo capítulo 23, “De celebratione misarum”, se regularon algunos aspectos cruciales que terminaron por configurar la Semana Santa que, en buena medida, ha llegado hasta nuestros días.

Allí se dispuso, entre otras cuestiones del máximo interés, que el provisor y Vicario General de la Archidiócesis hispalense debía señalar las calles por donde cada Cofradía debía de ir, así como la hora de su salida. El tenor literal de dicho título sinodal rezaba del siguiente modo: “Mandamos que nuestro provisor con las personas que con él suelen y acostumbran ajuntar para este objeto en esta ciudad, y en los demás lugares de nuestro Arzobispado donde hubiere más de una procesión, el Vicario, y donde no lo hubiere el Cura más antiguo, les señale las calles por donde cada una ha de ir y la hora en que ha de salir”. Según se desprende de su contenido, dicha práctica ya se hallaba establecida desde tiempo atrás, pero es ahora cuando se institucionaliza y adquiere carácter obligatorio lo que seguimos llamando “Cabildo de Toma de Horas”.

Desde la segunda mitad del siglo XVIII se impuso la costumbre de imprimir la nómina de las Cofradías penitenciales, indicando su sede canónica y su día y hora de salida, tradición que se ha conservado, incluso con una mayor prolijidad de datos, pues hoy se refleja la totalidad del itinerario de cada Hermandad, y sus horarios de salida, entrada y paso por cuatro puntos de la carrera oficial: Campana, Plaza de San Francisco, Puerta de San Miguel y Puerta de Palos.

Este “señalamiento de horas” tenía lugar, en origen, el Martes Santo, en la Capilla de las Doncellas de la Santa Iglesia Catedral, constituyéndose un juzgado compuesto por el Provisor con su Fiscal y el Presidente del Ayuntamiento con alguno de sus Tenientes, asistidos de Notario, secretario y otros oficiales de estas autoridades eclesiástica y seglar. Concurrían todos los Hermanos Mayores, y en algún caso, los Mayordomos, como ahora lo hacen algunos Diputados Mayores de Gobierno. De las Diligencias tomadas se extendía acta duplicada para los archivos de ambas jurisdicciones. Desde la fundación del Consejo General de Hermandades y Cofradías, es su secretario quien se encarga de levantar acta, y su Presidente forma parte de la mesa.

Cabildo Toma de HorasA partir de 1844 el acto comenzó a desarrollarse en el Antecabildo catedralicio y desde 1880 se trasladó su celebración al Sábado de Pasión. Con posterioridad, ya en pleno siglo XX, se conoció su discurrir en la Sacristía Mayor, en la Sala Capitular y, desde hace varios años, en la Capilla Real, adelantándose su convocatoria hasta el domingo previo al Pregón de Semana Santa, esto es, catorce días antes del Domingo de Ramos.

Carácter protocolario y funcionalidad práctica se aúnan en este Cabildo de Toma de Horas, una institución genuinamente hispalense por la que han trascurrido cuatro siglos, desde el episcopado del Cardenal Fernando Niño de Guevara hasta nuestros días.

Capilla Real de la Catedral

Scroll al inicio